Hemos creado un reto en migranodearena.org para recaudar 12.000€ y defender a Salamanca de los malos olores y de los vertidos al río Tormes.
Resumen de la situación de los olores y contaminación ambiental en Salamanca y su Alfoz; Villamayor, Doñinos de Salamanca, Aldeaseca, Aldeatejada, Los Villares, Cabrerizos, relacionada con la empresa SERVCOR LOGISTICS S.L. U. (antes Fernando Corral e Hijos, S.L.)
Desde el año 2000, los vecinos de Villamayor hemos estado luchando contra los malos olores, ruidos y contaminación ambiental procedentes de la planta de transformación de subproductos animales no destinados a consumo humano (SANDACH) de categoría 3, operada por SERVCOR LOGISTICS S.L.U (antes Fernando Corral e Hijos, S.L.).
Esta planta, ubicada en Doñinos de Salamanca, ha sido el foco de denuncias continúas debido a las molestias que causa a los habitantes, afectando actualmente a otras localidades cercanas y, cada vez con más frecuencia, a múltiples zonas de Salamanca capital y su alfoz.
La gravedad del problema no se limita a los malos olores. Los vecinos hemos reportado también la presencia de vertidos al río Tormes, ruidos molestos y emisiones de contaminantes peligrosos como dióxido de azufre (SO2) y compuestos orgánicos volátiles (COV) cuya composición está por determinar.A lo largo de los años, estos problemas han generado un profundo malestar en la comunidad, exacerbado por la inacción de las autoridades locales y regionales, que no han tomado medidas eficaces para resolver la situación.
1. Problemas de olores y ruidos
El problema más persistente ha sido la emisión de olores nauseabundos que llegan a ser insoportables e irrespirables. Estos olores están vinculados al deficiente funcionamiento de los termodestructores de la planta y a la falta de otras medidas adicionales como sistemas de oxidación o máquinas de lavados de gases.
Por otro lado, los termodestructores de combustión mixta, grasa animal y gas, presentan averías frecuentes y carecen de un control adecuado. A pesar de la obligación de realizar una medición en continuo, se observa que estas comprobaciones no se han cumplido ni se cumplen de manera constante
Los ruidos excesivos también han sido una fuente de quejas. La planta no respeta los límites establecidos por la ley, que permiten un máximo de 70 decibelios durante el día y 55 decibelios por la noche. Sin embargo, los ruidos son constantes tanto de día como a altas horas de la madrugada. A pesar de las denuncias particulares de algunos vecinos, no se ha obtenido respuesta de estas denuncias por parte del Ayuntamiento de Villamayor, en primera instancia, ni de la Junta de Castilla y León, organismo responsable.
2. Vertidos al río Tormes
Otro problema grave es la contaminación del río Tormes. La planta ha sido denunciada en múltiples ocasiones por realizar vertidos no controlados de aguas residuales. En inspecciones realizadas en 2022, se encontraron zanjas abiertas en el recinto de la planta que contenían vertidos, incumpliendo los límites establecidos por la Autorización Ambiental Integrada (AAI). La toma de muestras no respeta la periodicidad ni la frecuencia determinadas por la normativa.
3. Contaminación atmosférica
Además de los olores y vertidos, la planta ha sido señalada por la emisión de contaminantes a la atmósfera. En 2014, un informe reveló que los niveles de dióxido de azufre (SO2) emitidos por la planta superaban en cuatro veces el límite legal permitido. Esto, junto con la falta de control sobre los metales pesados y los compuestos orgánicos volátiles (COV), ha generado una creciente preocupación sobre el impacto que puedan tener estas emisiones en la salud de todos. Existen numerosos testimonios de vecinos que indican problemas respiratorios que se agudizan en los episodios fuertes de olor.
4. Inacción de las autoridades
A pesar de las numerosas denuncias y quejas presentadas por los vecinos desde el año 2000, las autoridades locales (Ayuntamientos de Villamayor y Doñinos de Salamanca) y regionales (Junta de Castilla y León) han mostrado una falta de respuesta eficaz. Incluso después de un dictamen emitido por el Procurador del Común de Castilla y León en 2007, que reconocía la gravedad de la situación, no se han tomado medidas contundentes. Desde la plataforma, entendemos que esta pasividad en la ejecución de sus competencias podría estar incurriendo en un supuesto de responsabilidad patrimonial de conformidad con lo que establece la jurisprudencia del Tribunal Supremo (sentencias del 18/11/2002 y 29/05/2003).
La planta cuenta con una Autorización Ambiental Integrada (AAI) desde diciembre de 2008, que establece las condiciones para su operación. Sin embargo, a lo largo de los años, SERVCOR LOGISTICS S.L.U. (antes Fernando Corral e Hijos, S.L.) ha incumplido varios de los requisitos de la AAI, como las mediciones de contaminantes y la gestión adecuada de residuos. A pesar de esto, las sanciones o medidas impuestas no han sido suficientes para mitigar los problemas.
Cronología de los eventos más relevantes
Año 2000: Comienzan las denuncias vecinales por los malos olores, vertidos y ruidos excesivos.
Diciembre de 2007: El Procurador del Común de Castilla y León emite un dictamen a favor de los vecinos, reconociendo los problemas causados por la planta.
Diciembre de 2008: Se otorga la Autorización Ambiental Integrada (AAI) a la planta, imponiendo requisitos estrictos sobre las emisiones y vertidos. Sin embargo, los problemas persisten y la falta de un control eficaz impide hallar una solución adecuada a la situación.
Año 2014: Se entabla un juicio financiado por los vecinos (causa 4184/2014) contra la planta, pero la sentencia no es concluyente. Se dejó en manos de la JCyL la supervisión del correcto funcionamiento de la planta. Medida que a todas luces se ha visto infructuosa.
Julio de 2014: Un informe revela que los niveles de dióxido de azufre (SO2) emitidos por la planta superan cuatro veces el límite legal permitido.
Año 2021: Se declara la caducidad parcial de la AAI, afectando la combustión de harinas.
Junio de 2022: Se empieza a usar la aplicación Nasapp para grabar los episodios de olor. Se realiza una inspección presencial que confirma varios incumplimientos graves, a los que se le añade el mal funcionamiento del sistema de medición en continuo que no mide las emisiones de partículas a la atmosfera.
Agosto de 2022: Nuevas denuncias por vertidos al río Tormes y falta de correcciones eficaces.
Diciembre de 2022: Se publican los resultados de la inspección de junio, confirmando que la planta sigue sin cumplir con las normativas ambientales, perjudicando así un paraje natural de gran importancia ecológica.
Año 2023: Se sigue en contacto con Inspección y Control Ambiental de la JCyL en Valladolid. En septiembre sale un nuevo informe que reitera los incumplimientos de la planta. Se replica la revisión de oficio de la Autorización Ambiental Integrada, un “copia y pega” de la anterior, con más incumplimientos.
Año 2024: Por fin, tras sucesivas denuncias al servicio de Inspección y Control Ambiental de la JCyL, en marzo, el Servicio de Prevención y Cambio Climático de la JCYL publica la revisión de oficio de la Autorización Ambiental Integrada, sin que la empresa aporte soluciones técnicas fiables para corregir con eficacia los problemas de contaminación múltiple descritos.
Ante el incremento de los episodios de olor nauseabundo, aumentan también los usuarios en la aplicación Nasapp. Hoy en día, los registros muestran que la planta de SERVCOR LOGISTICS S.L.U genera una de las zonas de máxima preocupación con relación a la contaminación odorífera en España.
Se crea la plataforma Cuidamos Villamayor que pretende, entre otros objetivos, canalizar una acción responsable de todos los vecinos afectados por esta situación.
Entre otras actuaciones, la plataforma ha mantenido reuniones con los responsables de la empresa y con autoridades locales en la búsqueda de soluciones pactadas, ha promovido diversas movilizaciones de protesta, ha servido de canal de comunicación y altavoz de la situación y aúna todos los esfuerzos de los vecinos para conseguir una zona libre de contaminación atmosférica, odorífera, de aguas y sonora.
Conclusiones y propuestas
A lo largo de los años, los vecinos de Villamayor, Doñinos de Salamanca y Salamanca y resto del alfoz, hemos soportado los efectos de una planta industrial que no ha gestionado adecuadamente sus emisiones de olores, ruidos y vertidos. A pesar de que la Autorización Ambiental Integrada (AAI) impone requisitos claros, la planta ha incumplido de manera reiterada con sus obligaciones, lo que ha resultado en una persistente molestia para los vecinos, una preocupación por la salud de todos, especialmente niños y ancianos, y un impacto negativo sobre el medio ambiente. Esta situación se ha incrementado desde la compra de la planta por parte del fondo de inversión Magnum Capital.
Los vecinos continuamos reclamando una intervención más firme por parte de las autoridades, solicitando el cierre de la planta o la implementación de tecnologías más eficaces que mitiguen el impacto ambiental.
Así mismo, desde la plataforma Cuidamos Villamayor consideramos que únicamente la unión de todos (vecinos , asociaciones, plataformas, corporaciones municipales…) puede traer como resultado que disfrutemos de un espacio libre de contaminación, repercutiendo positivamente en la calidad de vida de todos los que residimos en Salamanca y en su alfoz.
Apoya a la plataforma Cuidamos Villamayor.
“ Hoy por mí, mañana puede ser por ti”